Siempre ha surgido una cierta polémica sobre el punto 11 del
“Manifiesto ágil”: “Las mejores arquitecturas, requisitos y diseños nacen de
equipos autogestionados”. Este no será el primer artículo sobre este asunto
pero sí creo que lo es desde esta perspectiva.
La autogestión tiene como característica principal la
ausencia de jefe, es decir, alguien con capacidad para influir en el comportamiento
de las personas, en tanto que tiene la capacidad de distribución de beneficios escasos
(sueldo y reconocimiento positivo) y la administración de las penalizaciones (despido o reconocimiento negativo).