El pasado 4 de septiembre se
publicaba que los estudiantes de Secundaria de Madrid (12 a 15 años), tendrán
una nueva asignatura: programación. Comenzará su implantación en el curso
2015/2016 y, para su impartición, contarán con los actuales profesores. Aquellos
docentes que lo deseen, podrán formarse a través la plataforma online codemadrid.org,
desarrollada por Telefónica Learning Services. Se compone de 3 módulos de 50
horas cada uno: 40 en modo online y 10 en modo presencial. Cada módulo tiene el siguiente contenido:
- Programación I: Scratch, Scratch + Arduino, AppInventor
- Programación II: Processing, HTML5, CSS3, Javascript.
- Robótica: Arduino, Arduino avanzado (redes y Android), otros sistemas.
Es una buena idea potenciar el
uso de la tecnología más allá de los juegos o las redes sociales pero, ¿no hubiera sido mejor contratar profesores
con experiencia en este mundo? No dudo que haya que tener una formación
pedagógica para llevar un aula pero soy de la opinión que, para hacer pan,
prefiero que me enseñe un panadero a un maestro de escuela que haya hecho un
curso. Además, no era necesario ser tan ambicioso. Fijar los conceptos de
programación estructurada y conocer la arquitectura de una aplicación web, por ejemplo, hubiera
sido un alcance razonable y útil de cara a grados formativos posteriores. Eso
sí, no tan impactante como incluir las palabras “robótica”, “impresión 3D” o
desarrollo de “app's”.
Esta situación me recuerda a la
del bilingüismo inglés-español, donde solo se requiere un nivel B2 para ser
profesor de uno de estos centros, con el resultado que podemos imaginar. Hace
10 años que se inició el programa bilingüe en la Comunidad de Madrid y me temo
que el número de alumnos programadores al finalizar la ESO será equivalente al
de jóvenes bilingües actuales.
Imagen cortesía de "stock images".
www.freedigitalphotos.com
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